Datos de la Biblia nos han denotado que en la historia después de
Jesús existieron cuatro de los evangelistas mas importantes en los cuales
se encuentra el que hoy veintiuno de
septiembre recordaremos el cual lleva por nombre San Mateo, el cual en un principio fue llamado por San Marcos como hijo de Alfeo,
aunque tal ves su nombre original fue Leví, el cual abandona y adopta San Mateo al momento que acepta seguir a Jesús en la ida
espiritual ya que su llamado surge en el
año segundo del ministerio público de Jesucristo por lo que este le aceptó en la
santa familia de los apóstoles, y desde este momento el evangelista siguió al
señor hasta el momento del fin de su vida terrena.
Desgraciadamente no se conocen muchos rasgos biográficos acerca de el lo único que podemos decir
es que era de origen Galileo de nacimiento y que su profesión antes de tomar la
vida espiritual era la de publicano o recolector de impuestos para los romanos por cierto que ese oficio era infame para los
judíos. Sin duda podemos afirmar que a
pesar de que no se sabe mucho de la vida de este evangelista es uno de los más
conocidos pues forma parte de los cuatro grandes.