¡De
puerta en puerta!
Hoy en día el ser humano ha estado insatisfecho
en cuanto al resultado de sus necesidades, es decir esperamos una solución fácil
hacia nuestros problemas, la pregunta es: ¿Qué hacemos nosotros para
solucionarlos? o simplemente esperamos a que se resuelva por arte de magia.

Ahora es momento de reflexionar, de comer de su
mesa, ya que en cualquier momento él se pondrá el delantal y estará con
nosotros como siempre lo ha estado, los invito a tener fe, esperanza, humildad
y sobre todo a trabajar y levantar la cabeza en los momento aún más difíciles para
poder ser hombres de bien, eso sí, jamás debemos rendirnos.
He aquí una frase de reflexión para ustedes,
concebida de mi propia autoridad:
“Sonríe que la vida es corta, y si algún día
necesitas ayuda ve de puerta en puerta, que siempre estará alguien para
nosotros, y si en el camino no lo encuentras, sube al último peldaño de la
escalera, ya que Jesús te estará esperando”.
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